domingo, 13 de marzo de 2011

TODO UN CLASICO...

Jurar por los cojones de Vivaldi no es más que un burdo intento de tricotar una bufanda de colores para un oso panda.
No es una obra de autor musical famoso tal y como demuentran los meticulosos análisis que hemos practicado en el laboratorio durante 232 horas continuadas.
Este es un experimento que cualquier laboratorio realiza en apenas 7 minutos, pero nosotros hemos decidido dedicarle las 232 mencianadas horas, como valor demostrativo imperante, porque lo que es argumentos científicos probados no nos han quedado depués del análisis de orina que le hemos hecho a la elefanta del circo Price.
Que pasen ustedes un feliz domingo y no olviden ir a misa a arrepentirse de sus pecados...

3 comentarios: