jueves, 30 de diciembre de 2010

RIASE EL QUE PUEDA...

"Ansío empezar a morir para así iniciar el tramo final de mi contínua descomposición que comenzó el día en que nací.
Mal olor es lo que despido...
...¡hasta vivo!"

Sinopsis explicativa:
Una de las principales razones de la existencia del ser humano es su misión aromatizante del entorno en el que more. Se nos creó (eso creo) para oler y ser olidos. La distinción entre mal olor y buen olor ha sido una nefasta y absolutamente subjetiva puesta en valor de una medida físicoquímica medioambiental que nos empeñamos en reconducir y dominar con periódicas y frecuentes duchas, lavadas, desorodantadas y perfuméos. Aroma y peste son tan olores el uno como el otro, ahora bien, así como el primero es siempre artificial, el segundo es siempre... humano (iba a decir "natural").

Cierre del laboratorio por Navidad:
(pónganle a esto la música del turrón del Almendro, "vuelveee, a casa vueelve, por Navidad...")
Cierreee, que maal hueele, por caridad...
Este artículo ha sido elaborado por la perrita Trusti, experta sabuesa que cambió sus orejitas por una linda peluquita.

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